El anuncio de Moonbirds ayer sobre ser añadidos a la tabla de clasificación previa al TGE me hizo sentir curiosidad: ¿Qué pasó realmente con todas las otras colecciones de NFT que lanzaron un airdrop en algún momento? Los resultados son bastante interesantes: 1) Aunque no es sorprendente, es obvio que Pudgy Penguins son los grandes ganadores aquí. Con $PENGU, no solo expandieron masivamente su distribución por órdenes de magnitud, sino que también aumentaron el tamaño total de la comunidad casi 3 veces. 2) Miladys y Doodles se han movido más o menos de lado cuando comparas las valoraciones del ecosistema de hoy con el día de sus airdrops. Aún así, $DOOD al menos logró ampliar la distribución mientras que los poseedores de $CULT son bastante insignificantes. 3) Contrario a lo que muchos podrían creer, Bored Apes y Azuki salen como los grandes perdedores aquí. Desde sus TGEs, tanto $APE como $ANIME han diluido fuertemente las valoraciones, mientras que el valor de la marca en general se ha reducido prácticamente a la mitad en comparación con entonces. ¿Qué podemos aprender de esto? Lanzar un airdrop como marca no es un chiste. Claro, puede ser una herramienta poderosa para generar hype y aumentar los precios mínimos a corto plazo, pero mantener ese impulso es increíblemente difícil. A largo plazo, incluso puede resultar netamente negativo para la marca y la comunidad. El verdadero manual aquí es lo que @LucaNetz ejecutó con $PENGU. Mientras todos intentan copiarlo, la realidad es que tomó marketing de primer nivel, años de trabajo y creación de valor constante para construir una comunidad verdaderamente alineada y leal - una que no solo persigue ganancias a corto plazo. Esa es la verdadera ventaja para las marcas de NFT. Sin ella, no hay forma de mantener el impulso y la distribución a largo plazo. Será interesante ver cómo @spencer lo maneja con $BIRB.